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Los códigos QR, que a menudo aparecen como patrones intrigantes de cuadros y líneas, son herramientas poderosas que permiten el almacenamiento y acceso rápido a información a través de un escáner. A pesar de que se han vuelto comunes en los últimos años, su origen se remonta a 1994 en Japón, donde fueron desarrollados por Denso Wave para la industria automotriz. En este artículo, exploraremos cómo funcionan los códigos QR y cómo se utilizan en diversos contextos, especialmente en eventos.
¿Qué son los códigos QR?
Las siglas QR significan “Quick Response” (Respuesta Rápida), y se refieren a un tipo de código de barras bidimensional que facilita el acceso inmediato a información específica. Esto los convierte en herramientas valiosas para el marketing digital, ya que pueden almacenar información variada, desde datos sobre productos hasta enlaces a sitios web y accesos a eventos.
Inicialmente, los creadores del código QR dudaron de su utilidad, pero su adopción por parte de grandes fabricantes de automóviles demostró su efectividad en la identificación de piezas en la cadena de producción. En 1998, se estableció un estándar japonés para su funcionamiento y, dos años después, un estándar internacional, lo que permitió su expansión global.
Capacidad de almacenamiento de un código QR
Un código QR puede contener una increíble cantidad de datos:
- Números: hasta 7,089 caracteres.
- Alfanumérico: hasta 4,296 caracteres.
- Binario: hasta 2,953 bytes.
- Kanji/Kana: hasta 1,817 caracteres.
Los códigos QR pueden variar en tamaño desde 21 x 21 hasta 177 x 177 módulos, lo que significa que cuanto mayor sea el número de módulos, mayor será su capacidad de almacenamiento, con un total de 40 versiones disponibles.
Uno de los aspectos interesantes de los códigos QR es su capacidad de corrección de errores, gracias al código Reed-Solomon. Esto significa que incluso si el código está dañado, puede aún recuperar la información. Existen cuatro niveles de corrección, permitiendo la restauración de hasta el 30% de los datos perdidos.
Funcionamiento del código QR
Los códigos QR no son legibles a simple vista; requieren un escáner o un dispositivo móvil con la aplicación adecuada. Este proceso de lectura es muy rápido. Existen dos tipos de códigos QR:
- Códigos QR estáticos: contienen información fija que no se puede modificar una vez creada.
- Códigos QR dinámicos: enlazan a una URL que puede ser actualizada, permitiendo cambios en el contenido.
Hoy en día, la mayoría de los smartphones pueden escanear códigos QR a través de sus cámaras, facilitando su uso en diversas aplicaciones.
Usos comunes de los códigos QR
Los códigos QR son extremadamente versátiles y pueden utilizarse para múltiples propósitos, incluyendo:
- Enviar texto o información de contacto como direcciones y números de teléfono.
- Proporcionar enlaces a sitios web o aplicaciones.
- Facilitar el acceso a cuentas bancarias o tarjetas de crédito.
- Controlar el acceso a eventos y gestionar aforos.
- Autenticación de cuentas o acceso a redes Wi-Fi.
Acceso a eventos mediante códigos QR
Los códigos QR son especialmente útiles para gestionar el acceso y el aforo en eventos, sobre todo tras la pandemia. La tecnología ha permitido implementaciones eficientes para controlar el acceso en tiempo real. Ejemplo de esto es Gate Keeper 3.0, que usa códigos QR para la validación de entrada, facilitando el control de aforo.
Con la experiencia de haber gestionado el acceso de millones de personas en diversas actividades, ofrecemos soluciones técnicas que adapten la tecnología a la magnitud de tu evento, optimizando la experiencia del usuario.